Buscando al mencionado

Habia estado todo el dia pensando... recordando ¿como es que habia ocurrido todo aquello?... ¿como es que se habia permitido ser desterrado por Homurabi..? Y mas aun, pensaba en como acabar de una vez con todo aquello, pues no solo la tranquilidad en el mundo humano dependia de aquel equilibrio que intentaba proteger... su propio mundo corria riesgo a manos de aquel Shin.
La tarde lejos de aquel que le portaba como fiel acompañante o sombra hasta hacia unos momentos atras había estado tranquila... No habia prescencia de kokuchi cercanos, lo que le resultaba un tanto extrño, pero agradable...
Caminaba por las calles, buscando alguna grieta que facilitara el paso a aquellos seres. Mas en su largo recorrido no halló alguna. Las personas que trancitaban por las calles pasaban por alto su presencia, ignorantes de aquella existencia de platinos cabellos y atractivas facciones, haciendose resaltar por sobre todos los demas, claro... solo ante la mirada de quien pudiera verle, cosa casi imposible entre humanos.
Andubo por un par de solitarias calles y nada aun de la precencia de los kokuchis... Sin embargo, algo más llamó su atención...
Una chica de naranjos cabellos se hallaba caminando sola, con semblante distraido... Algo en ella le resulto familiar, no solo la delicada silueta que enmarcaba aquel delgado cuerpo a la luz que se colaba entre los descuidados callejones. Si no aquel sutil aroma que despedia, aquel sutil perfume que llenaba el aire de una dulce fragancia. Se hacerco a ella, con aquel semblante tranquilo que le caracterizaba.

-Rokuzawa-san... Que extraño verte aqui...

Comento, retirando aquel sombrero de copa negro para que aquella pudiese verle libremente.

Solo estaba concentrada en mis pensamientos, y nadie con quien hablar. Vida aburrida como siempre, nada interesante me pasaba en mi vida. Senti una voz que me llamaba, me parecio extraño, ¿un conocido talves? No, esa voz nunca la habia escuchado en mi vida, me voltee y definitivamente era alguien que no conocia. ¿Quien podria ser? ¿Como sabia mi nombre? ¿Acaso sera...?
-¿Quien eres? ¿Como sabes como me llamo?- lo mire extrañamente, esperando su respuesta.

Una sonrisa se dibujo en sus rojizos labios... No rea la primera vez que alguien reaccionaba asi a sus tan extrovertidas presentaciones... colocó nuevamente el sombrero negro sobre sus platinos cabellos mecidos por el calido viento de aquella tarde.

-Permiteme presentarme... Mi nombre es Shirogane.

Respondio, hacercandose a la chica apenas a unos pasos, claro, manteniendo uan distancia prudente de esta. Le era extraño que un shin no supiera de el ya que todo el reino de los shin se habia enterado de lo sucedido, o almenos eso creeia el... Pero aquella creencia fue completamente eliminada por aquella chica.

Lo miraba sospechosamente, no recordaba a nadie con tal aspecto. En cuanto supe el nombre quede impresionada. El era el que tanto buscaba, y porfin lo encuentro.

- ¿¿Tú eres Shirogane?? ¡Te he buscado por todos lados!- sonrei abrazandolo contenta, porfin mi motivo se cumplio. Me di cuenta lo que hacia y me separe del abrazo de inmediato, tenia que ser una chica con respeto, no podia ser asi de infantil. Borre mi sonrisa un poco y lo mire un poco seria- Quiero decir... una chica me volvio Shin, y me dijo que te preguntara todo lo que no entendia. Asi que me vas a tener que contestar algunas cosas ¿si?- Lo miraba lo mas serio posible, aun asi me era dificil ya que tanto tiempo buscandolo y ahora encontrarlo me causaba una alegria

Una ligera mueca de sorpresa se dejo ver en aquel rostro marfilado, pocas o mejo dicho nadie hasta ese entonces le habia abrazado con aquella calides y espontaneidad como lo habria hecho aquella joven. Mas aun que intento, no pudo estrecharle pues esta se habia apartado repentinamente de su lado. La escucho atento, algo molesto... muchos shin solo convertian a los humanos en sombras sin fijarse en las consecuencias.. Suspiro pesadamente y asintio a la chica de manera amable, despues de todo ella no era culpable de haber sido transformada y menos de que no se le haya dicho nada...
Asintio y sonrio a la joven de naranjos cabellos y se retiro el sombrero.

-Sera mejor que entonces busquemos un lugar tranquili para conversar...

Sugirio, buscando con la mirada algun lugar un para poder responder a las preguntas de la chica con mayor comodidad.

No evitaba poder sonrojarme bajando la vista por el repentino abrazo que habia hecho hace unos segundos, era la costumbre que tenia al encontrarme con alguien que buscaba. Su sugerencia me parecio correcta, ya que creia que era un tema que no se podia hablar en publico, tenia que ser mas en privado.
-M-me parece correcto, vayamos en un lugar que nadie nos vea...- dije aun apenada

-Esta bien...
Respondio, tomando ala chica de la mano, para guiarle a un parque cercano al lugar, un lugar tranquilo rodeado de vistosos arboles, si bien habia personas en ellgugar, cada una se concentraba en sus asuntos.
Amantes pasando un buen momento junto aquella persona amada, padres jugando con sus hijos o adolecentes compitiendo con sus compañeros...
Sin duda nadie se percataria de su presencia.
Camino hasta el lugar, parando frente a un tranquilo lago en medio del verde parque.
-Aqui podremos platicar a gusto...
Comento, mirando de reojo ala chica.

Lo segui hacia el parque para hablar mejor. Definitivamente todos estaban en sus asuntos y nadie se preocuparia por nosotros. Me senté en el suelo hacia su lado.
-Bueno...- Pense en que le podria preguntar, tenia que ser lo que no entendia.- Para empezar, ¿por que yo? ¿Que tengo que ver con esas bestias llamadas Kokuchis?- Lo mire de reojo un poco seria. Aunque me costaba ser seria porque aun tenia esa emocion, de ves en cuando daba sonrisas pero ladeaba el rostro e intentaba volver seria pero al precer era casi imposible.

Se sentó frente a la chica observándole atentamente, sus dudas eran de lo más normales para el peliplata, claro respondería con paciencia a cada una de las preguntas de la joven, mas una duda en él se hacía presente… ¿Cómo es que había sido convertida en shin? Y ¿Quién fue la sombra que le transformo en uno de ellos…?
Claro, primero tendría que responder a la cuestión de la joven para poder preguntar a ella aquellas dudas que surgían en él.
-Los Kokuchi son un tipo de sombras, ellos atacan indiscriminadamente pues carecen de conciencia propia… Normalmente ellos no pueden dejar su reino. Al mantener un equilibrio un mundo no puede ser invadido por los demás, así es como se mantiene la línea entre dos mundos. Pero el balance esta colapsando, por eso ellos entran a este mundo. Yo soy el encargado de mantener ese equilibrio, pero últimamente la cantidad de grietas entre este mundo y el de las sombras ha estado aumentando.
Explico con paciencia.
-Ya deberás saber que como sin, en el mundo de la luz es normal que desaparezcas lentamente… Lamento que tengas que verte involucrada en esto.
Comento tranquilamente y con un semblante ligeramente aturdido tras su ultimo comentario, mientras una brisa suabe y ligeramente humeda, mesia suabemente sus platinos cabellos y la calida luz del sol acariciaba el palido rostro del ojiazul.
-Si no es mucha molestia.. podrias decirme ¿como es que fuiste convertida en shin..? es decir.. ¿quien te convirtio..?
Pregunto con semblante atento, mirando diectamente a los cristalinos y dulces ojos de la joven, que ofresian la mas calida e inocente mirada.

Escuche atentamente las respuestas a mis preguntas. Podia entenderlo todo ahora, despues de todo las cosas ocurren por algun motivo. Esto de convertirme en Shin era para ayudar un poco a Shirogane con el balance de la luz y oscuridad. Me parecio que lo que me hizo esa chica estuvo bien, pero hubiera sido bueno que me explicara. A mi me encantaba ser util de alguna manera.
-No.. no te preocupes, me encanta ayudar, odio ser inutil y no hacer nada cuando en verdad puedo hacer algo. Creo que ser Shin no es tan malo.- Le sonrei tiernamente, queria que cambiara la seriedad de su rostro. Cuando me llego la pregunta suspire. -Pues no lo se, me dio un beso y me senti extraña, fue una chica. No recuerdo muy bien su nombre.. Creo que era algo de Kari... o nose...- desvie un poco la vista un poco seria.